¡Orgullo mexicano! José Fernández fue el encargado de diseñar los trajes de los tripulantes de la nave Crew Dragon. Te contamos su trayectoria.
¡Orgullo mexicano! Con el lanzamiento de la nave Crew Dragon de la NASA de la mano de Elon Musk, SpaceX, México también llega al espacio exterior. Es gracias a José Fernández, quien fue comisionado por el fundador de Tesla para diseñar los trajes que los astronautas usarán en el espacio.
Elon Musk, quien tenía el deseo de hacer trajes dignos de película, contactó a José Martínez pues ya había hecho trajes para superhéroes de la pantalla grande. Con ello se inaugura la era moda espacial, y qué mejor, de la mano de un mexicano.
José Fernández inició su carrera en 1989 como modelador de los monstruos de la película Gremlins. Durante la década de los noventa siguió participando como diseñador en películas como Godzila, Hombres de negro y Alien III.
Sin embargo, Batman ha sido la franquicia en la que más ha destacado y por la cual se le identifica. Ha participado en el diseño del traje de tres versiones cinematográficas del hombre murciélago, así como en el diseño de los trajes de X-men y los Cuatro Fantásticos.
También trabajó en los cascos de las películas Pantera Negra, Capitán América y Iron Man 2. En 2014 creó el emblemático par de cascos que usó Daft Punk en los premios Grammy Awards.
La participación de José Fernández en el diseño de los trajes
La participación de Fernández en la creación de los trajes que hoy usan los astronautas Doug Hurley y Bob Behnken comenzó hace tres años. Space X se encargó de contactar al diseñador, quien inicialmente pensó que se trataba de una producción de cine.
José Fernández aceptó hacer el diseño del casco, pues sólo se disponía de dos semanas para hacerlo. Sin embargo, Elon Musk no quedó complacido con ningún otro diseñador y decidió esperar seis meses para ver materializado el trabajo de Fernández.
José Fernández trabajó en un traje funcional, pero con estilo. La idea es que cualquier persona que lo use sea vea bien, algo semejante a lo que sucede con el esmoquin. Por ello el traje posee líneas que se ajustan a las del cuerpo humano. Sin embargo, el traje también funciona como un hardware que se conecta a la nave espacial, fusionando ingeniería y diseño.
El diseño, con un evidente toque minimalista, hace que los astronautas luzcan elegantes y heroicos, como si hubieran salido de un película futurista. Asimismo lucen ligeros, en contraste con los trajes de Alien o Armaggedon.