Peruri 88 es el nombre oficial de este polémico proyecto. Se trata de una torre de usos mixtos que combina espacios verdes con densidades más altas, utilizando tipologías del tejido urbano actual.
El proyecto ofrece una gran variedad de tipologías de oficinas y viviendas, desde grandes superficies de oficinas hasta unidades de vivienda / trabajo, desde lofts hasta casas adosadas, desde casas adosadas hasta casas de patio.
Cada uno de estos bloques urbanos cuenta con un parque semipúblico en la azotea, una gran cantidad de jardines, áreas de juegos para niños, spas, gimnasios, restaurantes al aire libre y piscinas disponibles para los habitantes y empleados de la oficina.
Sin embargo, la apuesta del despacho holandés MVRDV terminó siendo un experimento malogrado si se analiza desde la óptica de la integración urbana y del respeto al medio ambiente.
El trabajo de este despacho abarca tanto proyectos de arquitectura como de diseño de paisaje y diseño urbano.
Desde
sus orígenes, el trabajo de esta joven firma de arquitectura se ha
caracterizado por sus propuestas lúdicas y atrevidas como: la sede de la emisora pública holandesa VPRO y las viviendas WoZoCo
para ancianos en Amsterdam, proyectos que por sus cualidades formales e
innovadoras soluciones les llevaron al reconocimiento internacional.
La
arquitectura de este despacho holandés, al igual que la de muchas de
las firmas de arquitectura conformadas por jóvenes, más allá de
pretender la conformación de un estilo o lenguaje particular se ha
enfocado en la investigación de nuevas soluciones para problemáticas
específicas, es decir, pensando en la configuración de edificaciones que
respondan lo mejor posible a su contexto medioambiental, social y
cultural.
Por tal razón, la arquitectura de MVRDV, expone un
amplio abanico de soluciones formales y espaciales, que si bien no
muestra un estilo, sí está representada por edificaciones de formas
irregulares, dinámicas y ligeras, hechas con materiales austeros y
luminosos de colores neutros y limpios que evidencian, en múltiples
sentidos, el uso de las tecnologías más avanzadas.
Los
proyectos de MVRDV se caracterizan no sólo por su evidente juego formal
sino también por una postura crítica en torno a las maneras de habitar
convencionales, así como por una actitud irreverente frente algunos
sucesos de trascendencia mundial como en el caso del proyecto denominado
como “The Cloud” (La Nube),
en el que un par de torres conformadas por una serie de cubos o pixeles
simulan una gran nube de escombros que remite al trágico atentado
acontecido el 11 de septiembre sobre las torres gemelas de Nueva York.
El
proyecto, como era de esperarse, generó en la opinión pública más que
reflexión o hilaridad (habría que cuestionar en este caso cuál fue la
intención de dicho proyecto) una enorme irritación, sobre todo entre los
habitantes de la gran manzana, al grado de que los autores del proyecto
pidieron disculpas públicas argumentando un supuesto malentendido.
Este
hecho si bien no le resta mérito a la postura que tiene el despacho
MVRDV en torno a la producción arquitectónica contemporánea -que como ha
quedado de manifiesto sobre todo en esta primera década del siglo XXI
goza de una enorme libertad- sí resulta cuestionable, sobre todo cuando
la arquitectura se configura como capricho o cuando su pretensión más
allá del comentario sarcástico se convierte en bufonada.
La
audacia en el terreno de la creación es sin duda necesaria para generar
propuestas innovadoras, así lo han demostrado los creadores de los
grandes paradigmas arquitectónicos a lo largo de la historia, no
obstante el atrevimiento cuando es desmedido apunta por lo general hacia
el infortunio. Este es el caso del proyecto de ciudad vertical que han
diseñado recientemente para Yakarta.
La Torre Yakaerta de MVRDV, realizado en colaboración con Jerde Parntership, Arup y Wijaya Karya – Benhil Property,
se desarrolla sobre una superficie de 360.000 m2 y tiene la intención
de convertir un edificio de Yakarta en una ciudad vertical que combina
la idea de obtener más espacios verdes.
El rascacielos de 400
metros combina un uso mixto incorporando diversas facilidades como
tiendas, oficinas, viviendas y un anfiteatro exterior entre otros.
El proyecto ofrece una tipología variada que incluye espacios
para viviendas, espacios para oficinas, lofts y áticos para actividades
diversas.
Cada uno de los bloques urbanos dispone de espacios
verdes semipúblicos ubicados en los techos que incluyen también espacios
para la recreación como restaurantes y gimnasios. Los arboles ofrecen
sombra, mientras que gracias a la altura se puede aprovechar una brisa
refrescante.
Desde la planta 44 hasta 86 se encuentra un hotel
de lujo que se levanta desde un parque urbano en el aire. En la planta
88 por último se sitúa un restaurante panorámico.
Crear una ciudad vertical con jardines es una idea interesante,
sin embargo la resolución arquitectónica dada al proyecto es tan
pretenciosa como caótica: crear un espacio de gran densidad a partir de
múltiples contenedores de diferentes alturas, abigarrados de elementos y
dispuestos en ejes colocados en ángulos diferentes, más allá de remitir
a la idea de ciudad resultan en una especie de “Torre de Babel” en la
que el lenguaje arquitectónico se vuelve un magma confuso y
desconcertante.
Una de las mayores críticas que se han hecho a
las grandes metrópolis alrededor del mundo ha sido el caos derivado de
la densidad, de la promiscuidad de lenguajes y el ruido visual.
¿Por qué crear una ciudad a partir de estos elementos que
pueden considerase fallidos? Quizá la fuente de inspiración de este
proyecto haya sido el caos urbano pero ¿Porqué abordar el tema de manera
tan literal? Por sus características este proyecto más allá de plantear
una reflexión estetiza el problema exponiéndolo de una manera elemental
y frívola.
La solución que expone el proyecto, si bien resulta impactante a la vista –para esto la acumulación de cosas y el abigarramiento son efectivos-, es a la vez un experimento malogrado de ciudad contemporánea, sobre todo si se analiza desde la óptica de la integración urbana y del respeto al medio ambiente.
Al estructurarse justamente a partir de las ideas de acumulación, densidad y usos mixtos, repite los problemas propios de las grandes ciudades llevándolos a las alturas en lugar de plantear nuevas formas de habitar y de comprender y estructurar la ciudad.
MVRDV
vía: https://noticias.arq.com.mx/Detalles/14450.html#.Xr1lAMB7nIV